Seguro te ha pasado: lanzas campañas, publicas en redes, mandas correos, respondes mensajes… pero al final sabes que cada canal va por su cuenta. Y sí…un día hablas de una cosa, al siguiente de otra, y tus clientes se la pasan recibiendo distintas respuestas según quién les conteste o por dónde te contacten.
Y ahí está el problema: tus mensajes no conectan, tu marca no se recuerda y tus equipos no saben qué decir ni cómo decirlo. Y justamente eso no es por falta de esfuerzo, es por falta de una estrategia de comunicación.
Acá lo importante es que una estrategia de comunicación te ayuda a ordenar, unificar y dar coherencia a todo lo que transmites.
Por eso en este artículo vas a descubrir qué es esta estrategia, qué tipos existen, cómo crear tu propia estrategia paso a paso y cómo ponerla en práctica con un CRM como Clientify para que tus mensajes no se pierdan entre los distintos canales.
Suscríbete al blog de Clientify
¿Te gusta el marketing, la automatización o simplemente ver cómo otra gente hace las cosas bien? Pues suscríbete.
Cada semana te mandamos lo que a nosotros nos gustaría recibir: contenido directo y accionable.
¿Qué es una estrategia de comunicación (y en qué se diferencia de un plan)?
Una estrategia de comunicación es como un hilo que conecta todo lo que dices como marca…Pero ojo…porque no se trata solo de publicar o responder en redes, sino de tener claro qué quieres decir, por qué y para qué.
Son las acciones comunicativas que se realizan para lograr los objetivos de tu empresa. Y justamente cuando tienes una estrategia, ya sabes qué quieres lograr, a quién te diriges y qué tono usar para conectar.
Estrategia vs. plan de comunicación
En el día a día lo planteamos como lo mismo, pero hay una diferencia que es clave: la estrategia es la visión, y el plan hace referencia a la ejecución.
Como dijimos antes, en la estrategia tú defines qué quieres conseguir, cómo quieres posicionarte y qué valores quieres transmitir.
Y el plan de comunicación es el que detalla las acciones, los canales, las fechas, los responsables, los recursos que necesitas para lograr eso que te propusiste en la estrategia.
Comunicación interna vs. externa: cuándo priorizar cada una
Ten en cuenta que la comunicación interna es tan importante como la comunicación externa…y justamente por eso las mejores empresas no tienen una sola estrategia de comunicación.
La comunicación interna es todo lo que haces para mantener informados, alineados y motivados a tus equipos, mientras que la comunicación externa, en cambio, es la que proyecta tu marca hacia fuera: clientes, proveedores, medios o la comunidad.
Lo importante es que si recién arrancas, te enfoques en diseñar una estrategia de comunicación externa,ya que necesitas visibilidad y clientes.
Pero si tu empresa ya ha crecido o tienes varios equipos, descuidar la comunicación interna, tarde o temprano te va a pasar factura. Sin ella, los mensajes se distorsionan antes de llegar al público.
Por eso, como digo siempre…la clave está en el equilibrio: cuando la comunicación interna y externa van de la mano, cada mensaje refuerza la identidad de la marca y genera confianza, tanto en el equipo como en los clientes.
Elementos clave de una estrategia de comunicación
Una buena estrategia de comunicación se construye sobre tres pilares: objetivos claros, mensajes bien definidos y canales coherentes con tu público y presupuesto:
Objetivos (SMART) y KPIs:
Al igual que en otras áreas de tu negocio, tu estrategia de comunicación necesita tener metas claras y medibles.
Por eso, definir objetivos SMART (específicos, medibles, alcanzables, relevantes y temporales) te ayuda a enfocar tus esfuerzos.
Por otro lado, los KPIs son las métricas que te indican si vas por buen camino y pueden ser el número de interacciones, menciones en medios, visitas al sitio web, leads generados o cualquier otro.
Acá lo importante está en que, cuando defines bien tus objetivos y KPIs, tienes una visión bastante clara de qué funciona, qué no y dónde ajustar para obtener mejores resultados.
Públicos y mensajes:
Si no entiendes a quien le hablas, entonces nunca vas a poder definir una buena estrategia de comunicación.
Piensa esto: no es lo mismo dirigirte a un cliente potencial que a un partner o a tu propio equipo; porque cada público tiene intereses, lenguaje y canales distintos.
Tu trabajo está en identificar esos grupos y diseñar mensajes que hablen su idioma. No se trata solo de cambiar palabras, sino de adaptar el tono, la emoción y la propuesta de valor para cada uno.
Y dejame que te doy un consejo: no hables igual con todos porque así, te aseguro, que vas a terminar sin conectar con nadie.
Canales y presupuesto:
Una estrategia efectiva no depende de estar en todos lados, sino en los lugares correctos.
Muchas empresas creen que cuanto más canales abarques, más clientes vas a conseguir…pero no. Lo importante es estar presente en donde tu público está.
Por eso, primero analiza a tu público, luego define qué canales usarás y ajusta el presupuesto en función de su impacto real.
Y ten en cuenta que comunicar bien no siempre cuesta más, pero sí requiere planificación.
Tipos de estrategias de comunicación
No existe una única forma de comunicar, sino diferentes tipos de estrategias según lo que quieras lograr, el canal que uses o el público al que te dirijas.
Conocer este tipo de estrategias es lo que te va a ayudar a elegir el enfoque adecuado y a evitar mensajes genéricos que no generan resultados.
Por objetivo: lanzamiento, confianza, posicionamiento, fidelización, expansión
Cada objetivo necesita una estrategia distinta:
- Si vas a lanzar un producto, necesitas comunicar novedad y urgencia.
- Si buscas generar confianza, tienes que enfocarte en la transparencia, las pruebas sociales y la coherencia.
- Si quieres posicionarte, tienes que repetir el mensaje hasta que lo asocien contigo
- Si tu idea es lograr la fidelización, enfócate en ofrecer una atención rápida y dar contenido de valor.
- Y si estás en modo expansión, tu comunicación debe inspirar autoridad y credibilidad en nuevos mercados.
Lo importante es entender en qué fase estás y adaptar tu narrativa al momento.
Por canal: SEO, RRSS, email/WhatsApp, eventos, etc.
Cada canal tiene su rol dentro de tu estrategia.
- El SEO ayuda a posicionarte y atraer tráfico orgánico.
- Las redes sociales sirven para generar conversación y cercanía.
- El email y WhatsApp marketing son ideales para nutrir relaciones y mantener el contacto directo.
- Los eventos refuerzan la confianza personal.
- Los canales tradicionales son potentes para reforzar reputación y alcance local.
No se trata de elegir uno, sino de combinarlos de una manera que sea coherente y efectiva para tu público.
Por público: interna y externa
Como dijimos antes, una estrategia centrada solo en el público externo puede funcionar a corto plazo, pero si tus equipos no están alineados, tarde o temprano esa incoherencia se va a empezar a notar.
Hazlo todo con Clientify: capta, automatiza y cierra ventas
Entra gratis en el espacio donde los usuarios de Clientify compartimos trucos, nos ayudamos entre nosotros y aprendemos a vender más con IA.
Comparte tus dudas y aprende con otros que también están creciendo su negocio.
¿Cómo hacer una estrategia de comunicación en 7 pasos?
Ten en cuenta que una estrategia de comunicación no se construye de un día para otro, ni sentándose a escribir mensajes.
Requiere de siete pasos clave que te ayudarán a ordenar tus ideas, conectar mejor con tu público y comunicar con coherencia en todos tus canales.
1. Analiza la situación actual:
Antes de comunicar, necesitas entender dónde estás. Revisa tu contexto interno (equipo, recursos, cultura) y externo (mercado, competencia, tendencias). Un análisis FODA te ayudará a detectar fortalezas, oportunidades y amenazas.
Y cuanto más claro tengas el punto de partida, más coherente será todo lo que construyas después.
2. Define tus objetivos y métricas:
¿Qué es lo que quieres lograr? ¿Buscas notoriedad, fidelización o generación de leads?
Define objetivos SMART (específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con plazo) y los KPIs que te dirán si vas por buen camino: alcance, tráfico, engagement, conversiones.
3. Segmenta y prioriza tus públicos:
Como comentamos más arriba, no todos los públicos son iguales ni merecen la misma atención en todas las etapas.
Identifica a quiénes te diriges (clientes, partners, empleados) y clasifícalos según su importancia o influencia.
Cuanto mejor entiendas a tus audiencias, más fácil será diseñar mensajes que realmente conecten.
4. Crea tus mensajes y define el tono:
Este paso es súper importante; porque acá se construye la esencia de tu marca. Qué quieres que piensen, sientan o hagan después de escucharte.
Define el tono (formal, cercano, técnico, inspirador) y adapta tu mensaje según el canal y el público.
5. Elige los canales adecuados y crea un calendario:
Selecciona los medios donde tu mensaje tendrá más impacto: redes sociales, email, WhatsApp, medios tradicionales o eventos.
Luego ordénalos en un calendario para que quede plasmado qué se publica, cuándo y con qué objetivo.
6. Ejecuta y coordina con tu equipo:
Una estrategia de comunicación solo funciona si todos los que participan en ésta están alineados.
Define quién se encarga de cada canal, qué herramientas se usan y cómo se hará el seguimiento.
Y un pequeño consejo: utiliza una plataforma que te permita crear automatizaciones para mantener el ritmo y en la que puedas verificar que cada mensaje tenga trazabilidad y coherencia.
7. Mide, evalúa y mejora continuamente:
Tranquilo que no hay estrategia perfecta, pero eso no quita que a la tuya la puedes ir mejorando mes a mes.
Analiza tus métricas, identifica qué canales y mensajes generan mejores resultados y ajusta lo que no funcione. Y ojo! porque lo que hoy atrae, mañana puede no hacerlo.
Evita los errores más comunes
Que una estrategia de comunicación se vea brillante en el papel no significa que no pueda fallar. Y si…hay veces que los mensajes se pierden porque no hay estructura, objetivos claros ni foco en el público.
Por eso, identificar los errores más comunes es el primer paso para evitarlos:
- No definir un objetivo claro:
Si no sabes qué quieres lograr (atraer leads, generar confianza o posicionar tu marca) entonces no vas a saber realmente qué es lo que tienes que decir. - No conocer bien a tu público:
Cuando no tienes claro quién te escucha ni qué le preocupa…entonces estás en problemas; porque ahí es cuando terminas hablando de lo que a ti te interesa, no de lo que él necesita. - Decir demasiado y sin coherencia:
Muchas marcas caen en el error de estar en todos los canales, pero sin una narrativa unificada. Eso genera ruido, contradicciones y mensajes vacíos. - No medir resultados ni aprender de ellos:
Si no analizas tus métricas, estás comunicando a ciegas. Lo que no se mide, no se mejora. Y justamente los datos están para ajustar y evolucionar. - Olvidar la comunicación interna:
Piensa esto: si dentro de tu empresa hay caos, afuera se nota.
Por eso cuando los equipos no están informados ni alineados, la comunicación externa deja de ser algo bueno y se vuelve un problema.
Error común | Qué provoca |
No definir un objetivo claro | Mensajes dispersos y esfuerzos sin foco. |
No conocer bien a tu público | Mensajes irrelevantes que no conectan. |
Decir demasiado y sin coherencia | Ruido, contradicciones y pérdida de identidad. |
No medir resultados ni aprender | Repetir errores y desaprovechar presupuesto. |
Olvidar la comunicación interna | Desalineación y mala experiencia del cliente. |
¿Cuáles son los KPIs de comunicación que más importan?
Medir los resultados de tu comunicación es tan importante como planificarla.
Los KPIs (indicadores clave de desempeño) te muestran si tus mensajes realmente conectan con tu público, si generan interacción y si contribuyen a los objetivos de tu marca.
Estos son algunos de los KPIs más útiles:
- Alcance y notoriedad:
Mide cuántas personas han visto tu mensaje, publicación o campaña. Es ideal para evaluar el crecimiento de marca y la eficacia de los canales de difusión. - Engagement o nivel de interacción:
Más allá del número de seguidores, lo importante es cuánto participan: comentarios, compartidos, clics o tiempo de visualización. Ésta métrica indica si tu mensaje genera interés real. - Tasa de respuesta y tiempo medio de atención:
Estos indicadores muestran la agilidad y la calidad de tu atención en canales como WhatsApp, email, chats, redes, etc.
Acá lo importante es que, responder rápido y con contexto, mejora la percepción de marca.
- Tráfico y conversiones asistidas:
Evalúa si tus acciones de comunicación contribuyen a llevar tráfico a tu web, landing o CRM, y si ese tráfico se convierte en leads o ventas. - Cobertura en medios y reputación:
Analiza menciones en prensa, colaboraciones o apariciones en blogs externos. La frecuencia, el tono y la relevancia de esas menciones reflejan el posicionamiento y la confianza que genera tu marca. - Satisfacción y percepción del cliente (NPS):
Más allá de los números, escuchar lo que dicen tus clientes es clave. Un NPS alto o un feedback positivo muestra que tu comunicación está alineada con lo que prometes.
KPI | Qué indica |
Alcance y notoriedad | Cuántas personas ven tus mensajes; crecimiento de marca y eficacia de distribución/canales. |
Engagement (interacción) | Nivel de participación real: comentarios, compartidos, clics y tiempo de visualización; relevancia del contenido. |
Tasa de respuesta y tiempo medio de atención | Agilidad y calidad de atención en WhatsApp, email, chat y redes; impacto en la percepción de marca. |
Tráfico y conversiones asistidas | Capacidad de la comunicación para llevar tráfico a web/landing/CRM y empujar a leads o ventas; contribución al funnel. |
Cobertura en medios y reputación | Menciones en prensa y blogs: frecuencia, tono y relevancia; posicionamiento y confianza de marca. |
Satisfacción y percepción (NPS) | Lealtad e intención de recomendar; alineación entre lo que prometes y la experiencia real. |
¿Cómo implementar tu estrategia de comunicación con Clientify?
Ya tienes tu estrategia de comunicación definida…entonces ahora llegó el momento de ponerla en marcha.
Y acá es donde Clientify marca la diferencia…justamente porque es una plataforma todo en uno que te permite centralizar todos tus canales, automatizar mensajes y medir resultados, todo desde un único lugar.
Por un lado, con el Inbox Clientify, tienes la posibilidad de conectar varios canales como Instagram, Facebook Messenger, email, WhatsApp, etc y así responder todos los mensajes desde una única bandeja de entrada.
Por otro, evitas que las conversaciones se pierdan entre distintas aplicaciones o personas y además, logras que cada interacción quede registrada en este único CRM, con su historial y responsable asignado, para así mantener una coherencia en el tono y la atención.
En el caso de las automatizaciones te ayudan a enviar mensajes en el momento exacto: recordatorios, seguimientos o campañas de fidelización sin tener que hacerlo manualmente.
Piénsalo así: si un contacto te dejó sus datos en un formulario porque estaba interesado en tu nuevo producto, Clientify le va a enviar automáticamente un WhatsApp con información relevante y lo va a asignar, de manera automática, al vendedor especialista.
Y, como con toda estrategia, no puedes perder de vista sus resultados. Por eso, Clientify genera reportes y dashboards que muestran las métricas de comunicación en tiempo real: tiempos de respuesta, volumen de conversaciones, rendimiento por canal o satisfacción del cliente.
Todo en un mismo entorno, para que tu estrategia no se quede en teoría, sino que se convierta en una práctica medible y mejorable cada día.
Preguntas frecuentes
1. ¿Cuánto dura una estrategia de comunicación?
Depende del objetivo. Algunas se diseñan para campañas puntuales, pero lo ideal es que tengas una estrategia base anual que revises y ajustes cada trimestre.
2. ¿Qué canales debería priorizar?
No existen canales “mejores”, solo más efectivos para tu público. Analiza dónde está tu audiencia y enfoca tus recursos ahí. Lo importante no es estar en todas partes, sino estar donde tiene sentido.
3. ¿Qué diferencia hay entre estrategia y plan de comunicación?
La estrategia define la dirección y los objetivos; el plan es la ejecución diaria que los hace realidad. Piensa en la estrategia como el “qué” y “por qué”, y en el plan como el “cómo” y “cuándo”.
Si tu estrategia es sólida pero tu plan no se ejecuta, te quedarás en las ideas. Si solo ejecutas sin estrategia, harás mucho ruido, pero sin rumbo.
4. ¿Cada cuánto debo revisar mis KPIs?
Lo ideal es hacer una revisión mensual para tener una visión fresca del rendimiento. Aun así, algunos indicadores, como la reputación de marca o el crecimiento orgánico, se analizan mejor de forma trimestral.
Lo importante es no dejar pasar tanto tiempo que los errores se repitan sin que los veas.
5. ¿Cómo saber si mi estrategia está funcionando?
Si tus mensajes generan respuesta, tus leads aumentan y tu marca empieza a ser reconocida por coherencia y confianza, estás en el camino correcto.
También lo notarás en la agilidad interna: cuando todos en tu equipo saben qué decir y cómo responder, significa que la estrategia está realmente integrada en la cultura de tu empresa.
Conclusión
Si quieres que tu empresa crezca de manera ordenada y sostenible, entonces tienes que diseñar e implementar una buena estrategia de comunicación. Porque cuando sabes hacia dónde vas, tus mensajes dejan de ser solo publicaciones sueltas y se convierten en herramientas que inspiran, conectan y venden.
Y como no se trata de comunicar más, sino de comunicar mejor, la clave está en ser coherente, constante y de medir cada paso que das.
Y justamente Clientify te ayuda a hacer eso posible: centraliza tus canales, automatiza tus procesos y mide cada acción para que no haya espacio para la improvisación. Asique aprovecha los 14 días de prueba y fíjate como estas funcionalidades de comunicación empiezan a transformar tu negocio.
Gestiona todo desde un sitio: capta, automatiza y vende con IA
Olvídate de las herramientas sueltas, centraliza comunicaciones, ventas y marketing con Clientify.
Activa tu prueba gratuita de 14 días y escala sin complicarte la vida.